Para continuar con los cambios que se nos presentan en la vida, quiero decirles que hace poco tomé una decisión que no me creía capaz de hacer, todo sucedió muy rápido.
Soy de las personas que normalmente antes de hacer algo, decidir algo piensa muy bien las consecuencias, los motivos por los que debería hacerlo, los motivos por los cuales no, es decir, cuando son decisiones importantes realmente me siento a pensar las cosas y con base en eso me decido.
Pero esta vez fue diferente, sucedió cuando menos me lo imaginaba, que cambio mi perspectiva sobre mi futuro. Lo más extraño es que tomé una decisión sin pensarlo demasiado por el simple hecho de que me "latió", algo me dijo que lo hiciera.
Llevo poco de haberme aventurado y la verdad no me a ido tan mal, sentí que fue muy rápida mi decisión y debí haberlo pensado más, pero a la vez no me arrepiento. Estoy muy contenta y me siento segura aunque tengo miedo de arruinar todo, de cometer un "fatal error" jajaja.
El punto de esto es, ¿cómo debe decir uno?, ¿pensar bien las cosas o aventurarse según te latan las cosas?, ¿cúal es la mejor forma de elegir camino al llegar a una encrucijada de la vida?. ¿Se vuelve también en una incertidumbre de la vida?
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